Estudiando Coímbra

Hay un dicho en Portugal, que dice que "Mientras Lisboa se divierte, Coímbra estudia, Braga reza y Oporto trabaja" Esta frase, aparte de reflejar la rivalidad existente entre Lisboa y Oporto, recoge la importancia que tienen Coímbra como centro universitario.
 
Pues bien, durante la pasada Semana Santa, algunos miembros de la Alberca, hemos podido disfrutar de Coímbra,  ciudad que alberga la universidad más antigua de nuestros vecinos lusos. 
Además, yendo con estos andarines, estaba claro que el viaje iba a dar mucho de sí, pues no solo  iba a ser un descubrimiento de la ciudad, sino además, de las zonas próximas, en las que hacer interesantes rutas senderistas. 
Al final, desarrollamos una apretada agenda de actividades, durante cuatro días, que ahora pasaré a detallar, por si alguien se anima a conocer esta zona de Portugal. 





Está claro que, dada  la importancia histórica que ha tenido la ciudad, pasear por sus calles te lleva a descubrir interesantes rincones, que han sido testigos del devenir de miles de estudiantes portugueses, que tenían, y aún tienen  en esta ciudad y su universidad, un referente de la cultura y el conocimiento.







Aunque lo descubrimos casi de casualidad, recomiendo comenzar el recorrido por la ciudad, visitando el centro de interpretación, situado en la Porta da Almedina, (lo encontrarás atravesando la puerta, en sentido subida y girando a tu izquierda). Esta puerta es el  principal punto de acceso al casco antiguo y  formó parte de la muralla que protegía la ciudad en la antigüedad. Es muy fácil llegar hasta ella y además, la visita a este centro de interpretación os valdrá para haceros una idea de la distribución de la ciudad, de sus monumentos más importantes y de algunos aspectos curiosos de su historia, aparte de poder subir hasta su torre, en la que puedes tener vistas de Coímbra desde una perspectiva diferente.
Además, hay que decir que se notaba que  la persona que nos atendió (Miguel, creo que se llamaba) disfrutaba con su trabajo, pues nos ofreció explicaciones muy interesantes y de una manera tan entretenida que íbamos aprendiendo cosas sin tener que hacer esfuerzo por memorizarlas. 




Vistas desde la Torre de la Porta Almedina



Por cierto, tenemos que agradecer al guía,  la recomendación que nos hizo respecto a un buen sitio para comer:  "Adega Paço do Conde",  todo un acierto¡¡¡¡¡





Impresionante

Importante tener en cuenta los horarios para comer en Portugal, puesto que tienen por costumbre comer más temprano que en  España. Es cierto que en ciudades muy turísticas, como es el caso, al final no hay problemas importantes, pero es aconsejable no demorarse mucho. 


Tras habernos mimetizado con la cultura portuguesa, a través de su gastronomía, jeje,  nos propusimos  realizar una visita más detenida por la ciudad. 











Si quieres visitar el centro, no te queda otra que subir cuestas

Azulejos y Portugal son palabras que van unidas






Merece la pena adentrarse en el jardín botánico









Detalle da Sé Velha




Desde el punto de vista urbanístico, hay dos elementos que condicionan claramente la vida de la ciudad, por un lado, la universidad en su parte alta, y por otro lado, el río Mondego en la parte baja. 



Zona de la universidad en la parte alta.











Lo que estamos aprendiendo de fotografía¡¡




Bóvedas de la antigua cárcel de la universidad










Catedral nueva

En la zona de la universidad es recomendable realizar una visita a la espectacular Biblioteca Joanina (recibe este nombre porque la mandó construir el rey D. João V de Portugal) No obstante, no puedo aportar fotos porque no estaban permitidas. Las entradas no se sacan allí mismo, sino en otro edificio de la universidad, muy cerca de la catedral nueva. Y ojo, porque a las 17 horas cierran, por lo que si quieres visitarla no lo dejes para el final. 



Zona del río Mondego en la parte baja de la ciudad








Estación de tren



Decir que, debido a ser fechas de vacaciones, no pudimos ver por las calles a los estudiantes con sus características capas negras, no obstante, paseando por las calles del centro de la ciudad, sí pudimos ser testigos de un elemento muy característico de la vida universitaria de Coímbra: Las Repúblicas¡¡  Son edificios donde se alojan estudiantes, compartiendo servicios como la cocina y colaborando, entre todos, en el mantenimiento de las instalaciones. Su origen se remonta, nada menos que, al siglo XIV cuando el rey D. Dinís ordenó la construcción de edificios para albergar a los alumnos de la universidad. Algunas pueden pasar desapercibidas, pero si vas con un poco de cuidado, es fácil dar con ellas, pues cuentan en sus fachadas con detalles variados y curiosos. Aquí dejo algunas de las que pudimos ver.

















Bueno, pues tras un repaso por lo que más me llamó la atención de la ciudad, paso ahora a detallar la otra parte de nuestro viaje: Rutas Senderistas por el entorno de Coímbra. 



Ruta por las Adeias do Xisto

Todo un descubrimiento¡ No me esperaba encontrar, en esta zona de Portugal, un entorno tan frondoso y lleno de agua por todos lados. Además, se trata de una ruta muy completa, no excesivamente dura, pero tampoco es un simple paseo, pues tiene cuestas exigentes y cuenta con el aliciente de pasar por numerosos lugares de interés, como un castillo, ermitas o  pequeñas aldeas, en algunas de las cuales encuentras  tiendas donde tomar una Super Bock bien fresquita. Por cierto, también existen piscinas naturales en las que  poder darte un chapuzón, así que ya sabes, si quieres, echa un bañador¡ 


Inicio de la ruta









El agua acompaña la mayor parte del recorrido





Pequeñas aldeas salpican la zona









Extremeños, de nacimiento y adopción, por el mundo


Repostaje en mitad de la ruta















Para todo en esta vida hay que tener gracia, hasta para hacer carteles











Aquí dejo el TRACK RUTA ALDEIAS DO XISTO


Es cierto que, como hay varias aldeas repartidas por la zona, las opciones del recorrido son muy diversas, en nuestro caso, como en la parte final de la ruta ya hacía bastante calor, tras la visita al castillo, optamos por enlazar de nuevo, con el camino que habíamos tomado a la ida, que era mucho más fresco gracias a la vegetación. De esta forma, la parte última de la ruta la pudimos hacer bajo sombra, lo cual se agradeció bastante. 




Ruta por las salinas de Figueira da Foz

En este caso nos acercamos a la conocida localidad costera de Figueira da Foz. 
Esta ruta me  gustó mucho por ser una ruta muy visual, gracias a las divisiones del terreno que se hacen para el proceso de obtención de la sal, además de la multitud de colores que puedes ver,  de los reflejos que se generan con las charcas y  de la cantidad de aves que puedes observar. Todo un goce para la vista. 



















Existe un centro de interpretación, que cuenta con paneles explicativos y con  una exposición de herramientas originales utilizadas antiguamente y donde también puedes visualizar un reportaje, que explica con claridad la historia de estas salinas y cómo es el proceso que realizan para la obtención de la sal. Es conveniente visitarlo antes de realizar la ruta, para que ésta sea mucho más interesante. 


























Ruta da Boa Viagem

También por la zona de Figueira da Foz, pero en este caso, más próximo a la  playa. 
Interesante por ser algo diferente, ya que el sonido del mar te acompaña durante buena parte de la subida y también, es cierto, que permite apreciar perfectamente la diferencia de vegetación, según la cara que tomes, vertiente  seca o vertiente húmeda. Además, cuenta con vistas muy buenas de todo el entorno y es fácil encontrar durante el trayecto numerosos restos fósiles de invertebrados.

 
































Ruta por la Mata de Buçaco


Conocido como el bosque encantado, su existencia está ligada a diversas órdenes religiosas, como los Carmelitas Descalzos,  que estuvieron asentadas en la zona y que se encargaron de la construcción del monasterio (donde hoy se ubica el hotel de estilo neomanuelino)  y del diseño y cuidado de los jardines.
Entre las diferentes especies arbóreas que podemos encontrar están el aliso común, mimosas, tilos o acacias.  












Construcción inspirada en el Monasterio de los Jerónimos de Lisboa





Dejo aquí el TRACK DE LA RUTA



Hasta aquí el resumen de las rutas senderistas, y para finalizar, un popurrí de fotos simpáticas del viaje. 






Bica o espresso 



No podía faltar una copa de Beirão

















Al ataqueeeeerrr¡¡¡









AQUÍ TIENES TODAS LAS FOTOS




Bueno, pues hasta aquí el resumen de nuestro último periplo por tierras portuguesas, que aunque ha estado muy bien aprovechado, tiene aún tesoros muy interesantes por visitar, como las ruinas de la ciudad romana de Conímbriga, pero eso ya será contenido de otra incursión en tierras lusas. 




Espero que os haya gustado el resumen y nos vemos en la próxima. 





Comentarios

  1. Qué barato me ha costado esta incursión al país vecino! Pero no... ahora tengo más ganas de conocer las Aldeas do Xisto y la zona de Figuera... Qué maravilla y que diferente el paisaje de las salinas. Gracias Javier

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    1. Pues sí, es una zona que realmente merece la pena visitar. Gracias a ti por leerlo.

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